Pero no es la primera vez que el presunto autor de los hechos, un joven de 20 años con "problemas mentales", pasa por dependencias policiales, aunque vuelve a quedar en libertad. Y cada vez amplía más su área de influencia, que ya abarca desde Greco hasta Polvoranca.
"Es cierto que se ha producido un repunte en daños a vehículos", aseguran fuentes de la Jefatura Superior de Policía, que han recibido las denuncias de los vecinos por la rotura de retrovisores y lunas o el pinchazo de ruedas. Los agentes sospechan que tiene un "afán de notoriedad" vinculado a su desequilibrio. Para frenarlo se ha reforzado la vigilancia e, incluso, intentado razonar con él.
El antecedente de Fuenlabrada
Los vecinos de Fuenlabrada también vivieron su particular infierno entre noviembre de 2009 y mayo de 2010, justo en el barrio delimitado entre las calles Málaga y Canarias. Durante seis meses, un pirómano se dedicó a prender fuego a cuantos coches se encontraban en la vía.Actuaba siempre de madrugada y eran las llamas las que solían advertir a los residentes, que salían de sus casas manguera en mano para intentar salvar sus vehículos. Llegaron a arder hasta una docena.
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